BMW ya llevaba casi dos años dándole vueltas al concept que presentó en Pekín 2010 y desde entonces las fotos espía de este modelo han caído por goteo en manos de la prensa especializada. El tiempo ha pasado muy rápido, y ahora los diseños a los que pretende hacer frente (CLS, Panamera o A7 Sportback) ya no resultan ninguna novedad entre el selecto público al que va dirigido. Puede que los de Munich lleguen algo tarde, pero seguro que el último en recibir la denominación “coupé de cuatro puertas” tiene algo que decir… Lo primero es que este nuevo modelo será el único de los cuatro mencionados que ha optado por homologar una quinta plaza en el habitáculo. No será nada cómoda porque no hay espacio para las piernas y además es más alta que las otras dos, pero al menos la tiene. Así, BMW utiliza para su habitáculo la denominación 4+1 y asegura que ha sido posible gracias a un aumento en la batalla de hasta 113 milímetros con respecto a un Serie 6 Coupé, casi hasta llegar a los tres metros (2,97). La carrocería también ha crecido 12 cm en longitud hasta lograr cinco metros exactos y otros 2 cm en altura (1,39 m). Pese a ser un modelo ligeramente más alto, su mayor longitud y batalla hacen que el centro de gravedad vaya más cerca del asfalto.
460 litros de maletero
Lo que no aumenta, sin embargo, es la capacidad del maletero, que repite la oferta de 460 litros del modelo de dos puertas y que es inferior a la del A7 Sportback o a la del Mercedes CLS, en ambos casos bastante superior a 500 litros. A pesar de todo, esta cifra puede quedar prácticamente triplicada al abatir los asientos traseros, donde se alcanza un volumen máximo de 1.265 litros. Sólo el Porsche Panamera es más limitado en este sentido, con 445 litros iniciales.
Cambios discretos
A nivel de diseño, estamos ante una modificación muy ligera del Serie 6. La generosa ampliación de la batalla ha servido para colocar dos pequeñas puertas traseras, dar sensación visual de amplitud y resolver la trasera con un montante C muy elegante que lleva grabada la inscripción “Gran Coupé” y que sirve para marcar el tercer volumen de la carrocería. Los cambios se resumen en una terminación galvanizada entre los antiniebla y las entradas de aire y una mayor aportación del aluminio en la fabricación, lo que ha permitido contener su peso con respecto a las otras dos versiones de la serie 6.
En el interior, los asientos van colocados en una posición ligeramente superior a los del Serie 6 Coupé y el cuadro de instrumentación y el salpicadero siguen dando prioridad total al conductor. Independientemente del motor, de serie se incluyen los faros de xenón, asientos en piel, climatizador de dos zonas, llantas de 18 pulgadas y sistema de sonido de alta fidelidad. Entre el equipamiento opcional del Gran Coupé destacan sobre todo la iluminación por LED para los faros autoadaptables y también para los antinieblas, así como el sistema de sonido firmado por Bang & Olufsen, así como un paquete “M” para la carrocería o el programa de personalización BMW Individual.
La lista de opcionales, como es habitual en BMW, será casi infinita, y en ella encontraremos las últimas tecnologías de la marca, como el Night Vision, el asistente de aparcamiento, la conexión a Internet y el módulo de TV, cuatro zonas para el climatizador, el Head Up Display así como el sistema de navegación Professional con una pantalla de 10,2 pulgadas.
Seis y ocho cilindros
En la oferta inicial del Gran Coupé se incluyen los motores con seis y ocho cilindros en V de las versiones coupé y cabrio. Los de seis serán el gasolina 640i de 320 cv y el diesel 640d de 313 cv, mientras que la versión tope de gama seguirá siendo el V8 650i de 450 cv. Todas las versiones llevarán caja de cambios automática de 8 relaciones y las funciones ECO PRO del programa EfficientDynamics, con las que se pueden conseguir consumos muy bajos. Por ejemplo, con los neumáticos más estrechos posibles se pueden conseguir un consumo mixto de tan sólo 5,5 litros en el caso del motor diesel, mientras que la versión de gasolina menos potente firma un gasto de 7,7 litros en las mismas circunstancias. Ambas versiones invierten el mismo tiempo (5,4 segundos) en acelerar de 0 a 100 km/h.
En cuanto al V8 todavía están por confirmar los datos oficiales de consumo, aunque el valor estará ligeramente por debajo de los 9 litros. Es sin duda el más rápido de la gama, con una aceleración de 4,5 segundos si va equipado con tracción total (es el único con el que estará disponible). En el caso de ser tracción posterior, la diferencia es de tan sólo una décima (4,6 segundos).
A principios de 2012
BMW no debería retrasar mucho más el estreno de su nuevo Gran Coupé. Las fechas previstas por la marca hablan de las primeras semanas de 2012, aunque todavía no hay un día concreto. Tampoco el precio se ha desvelado, aunque para hacernos una idea tendremos que acercarnos (si no superar) los 80.000 euros por la versión más accesible. La diferencia con respecto a otros modelos residirá en las increíbles soluciones de ahorro de combustible, así como en una quinta plaza que, si bien no sirve para largos trayectos, permite cierto desahogo a la hora de transportar niños o un quinto pasajero de forma puntual.
