Un motor de seis cilindros TwinTurbo de 431 caballos transporta a este ‘bicho’ desde parado hasta los 100 kilómetros/hora en 4,6 segundos, tiempo que se reduce a 4,4 segundos si se monta la caja de cambios automática DKG de siete velocidades y doble embrague. Ponle los calificativos que quieras porque seguro te quedas corto. El BMW M4 Cabrio es de todo menos discreto, soso y aburrido. Se trata de todo un deportivo de 431 caballos que se disfruta tanto con techo cerrado como al aire libre.
Agresivo y aerodinámico
De la estética poco más podemos decirte de lo que ves en la fotografía: deportividad y agresividad se respiran desde las cuatro salidas de escape al potente paragolpes delantero, sin olvidar las llantas ‘gordas’ o las aberturas de aire laterales tras los pasos de rueda delanteros que ayudan al flujo aerodinámico pegando al coche al suelo a alta velocidad.
Bajo el alargado capó del M4 Cabrio (una seña de identidad de los BMW) se aloja un seis cilindros de tres litros Twin-Turbo. La anterior generación optaba por un V8 pero esta vez se ha decidido prescindir de dos cilindros para buscar mayor eficiencia sin perder carácter. Y decimos esto mismo porque el M4 Cabrio tiene una punta prohibitiva de 250 kilómetros/hora, con un 0 a 100 kilómetros/hora de 4,6 segundos. Si estas cifras se te pudiesen quedar cortas, atento: el paquete opcional Driver amplía 30 kilómetros/hora la velocidad máxima (hasta los 280) y el 0 a 100 se reduce 0,2 segundos (4,4) con el cambio automático de doble embrague y siete velocidades DKG. Aunque en un vehículo de estas pretensiones el consumo pasa a un segundo plano, la cifra alcanzada es de récord: 9,1 litros de media a los 100 para la caja manual y 8,7 litros con el DKG. En estas mejoras dinámicas también influye que el M4 Cabrio sea 60 kilogramos más ligero que su antecesor (el M3 Cabrio), reducción de peso favorecido por el uso de aluminio y plástico reforzado con fibra de carbono en más partes de la carrocería que de costumbre.
En 20 segundos
Hemos dejado para el final todo el sistema de capotado y descapotado; entiéndenos, es la emoción… El techo es duro escamoteable en tres piezas cuyo mecanismo de apertura y cierre es totalmente autónomo; el conductor o el acompañante sólo pulsan el botón correspondiente ubicado en la parte baja de la consola central y se inicia el ‘cortejo’. Los dos procesos se hacen en 20 segundos hasta los 18 kilómetros/hora. Por encima de esa velocidad el sistema no funciona.
Si babeas y ardes en deseos por comprarte uno, debes saber que los primeros que podrán disfrutarlo serán los norteamericanos este mismo verano. Después llegará a Reino Unido y Alemania. En España habrá que esperar hasta finales de este mismo año. Aguantaremos estoicos hasta entonces, no queda otra.
