Pero la tecnología va más allá ya que se ha creado, incluso, unos tiradores que no dejan abrir las puertas en caso de que circulen por las proximidades ciclistas o moteros. Si hace poco más de un mes te contábamos cómo funcionaba un artilugio que llevaba desarrollando Volvo desde hace tiempo para alertar a los conductores y a los ciclistas a través del coche y un móvil respectivamente, hoy es el grupo Jaguar-Land Rover el que da a conocer un mecanismo similar que informa al conductor del coche exclusivamente de un inminente colisión.
Para ello, se ha desarrollado un conjunto de sensores exteriores que detectan cuándo se aproxima una bicicleta o una motocicleta y la identificará; una vez ‘fichada’ el vehículo que se trata, BikeSense se pondrá a trabajar para comunicar al conductor de los posibles riesgos que puede acarrear su actitud al volante. Todo esto lo hace a través de las luces del habitáculo y los sonidos que se emiten por los altavoces, unos estímulos que aseguran son más efectivos que otro tipo de señales. El ‘ruido’, además, será muy característico: el ring-ring del timbre de una bici o un claxon de una moto; así, si el conductor no ha visto el peligro, ya sabe a lo que se va a enfrentar.
Trabaja por nosotrosTras todo lo anterior, BikeSense ‘localiza’ por dónde se aproxima la moto o la bici; por ejemplo, si está adelantando por la izquierda o situándose al nivel del turismo o el todocamino que conducimos por el lado derecho, el sistema podrá `tocar´ cualquiera de los dos hombros del conductor para advertirle. El objetivo es que el conductor del turismo mire especialmente a la altura del hombro para identificar el riesgo potencial y reducir, por tanto, la posibilidad de un accidente.
Y, por si fuera poco, una serie de luces led ubicadas en los marcos de las ventanas, el salpicadero y el parabrisas se iluminará en ámbar y posteriormente en rojo para alertar de la cercanía real (con el primero, la distancia es relativamente segura mientras que, con el segundo, no) y que poseerán vida propia, ya que no serán fijas sino que se irán encendiendo y variando la intensidad según pase o no el peligro. BikeSense también puede actuar en el pedal del acelerador vibrando o permaneciendo rígido para que el conductor sepa que no debe avanzar hasta que haya pasado el ‘problema’ con el que se ha topado.
El dispositivo añade una última función y que salta cuando el turismo está aparcado: si se aproxima un ciclista o un motero por el lado en el que un ocupante desea bajarse, volverán a funcionar las luces y los testigos acústicos, en este caso, en el tirador de la puerta. “Gracias a su uso instintivo, BikeSense tiene el potencial de aumentar la conexión ente entre los actuales sistemas de seguridad y detección de peligros del vehículo y el conductor y sus pasajeros”, especificó el doctor Wolfgang Epple, del departamento de investigación y desarrollo técnico de Jaguar y Land Rover. “Esto podrá reducir el riesgo de choques para los usuarios de la vía pública, puesto que aumenta la velocidad de respuesta y garantiza la ejecución de la acción más correcta para evitar un accidente”, finalizó.
