A día de hoy nadie sabe cómo será el camino del Bentayga, pero lo que sí es seguro es que el vehículo inglés se ha ganado un hueco en los libros dedicados al automovilismo. Sí, porque el protagonista de estas líneas no sólo se convierte en el primer SUV de la historia de Bentley sino que además llega cargado de elementos que le harán estar ‘en boca de todos’. El Bentayga ha llegado finalmente al mercado tras un desarrollo un tanto 'movido' que se ha ido retrasando, principalmente, por lo arriesgado de su diseño. En un mercado en el que las líneas fluidas y las esquinas redondeadas marcan la tendencia, su diseño cuadrado y su forma poco definida pusieron al Bentayga en un serio aprieto. De ahí que el equipo de diseñadores tuviera que cambiar varios de los trazos originales. Sin embargo, más allá de su peculiar apariencia, que está influenciada tanto por el Continental GT como por el Mulsanne, este SUV es todo un mastodonte. O al menos así lo corroboran sus 5,14 metros de largo, unas dimensiones que harán las delicias de los jeques árabes, uno de los grandes mercados en los que el Bentayga estará presente.
Lujo a raudales
Además, para aprovechar mucho más el espacio, el SUV británico, tendrá una configuración de cuatro asientos en donde los dos traseros irán realmente cómodos en unos asientos eléctricos con masaje, calefacción y ventilación, al tiempo que podrán disfrutar de la vista panorámica de los 1,35 metros cuadrados del techo solar o de las pantallas de 10,2 pulgadas situadas tras los reposacabezas delanteros, con sistema operativo Android, 4G, WiFi y Bluetooth, y que se podrán llevar donde quieran gracias a que son extraíbles.
Para cuando quieras colocarte a los mandos, en el puesto de conducción encontrarás un Virtual Cockpit de 12,3 pulgadas, heredado directamente de Audi, sobre el cual se proyectará un nuevo sistema Head-Up Display. A su derecha se ubica la gran pantalla táctil de 8 pulgadas en la que se incrusta un disco duro de 60 Gb para almacenar todo lo que quieras.
Todo ello rodeado de los más altos estandartes de calidad con un interior de lujo en el que se han empleado los materiales más nobles como el cuero, el metal y la madera, todos ellos rematados a mano y elegidos cuidadosamente. Sin embargo, más allá de las finas costuras o del perfecto ensamblaje de sus materiales, un elemento destaca por encima de todos: el reloj que preside la consola central. Como es habitual en este tipo de modelos, Bentley ha colaborado con maestros relojeros para su elaboración. En este caso ha pedido ayuda a la compañía suiza Breitling, el cual ha elaborado el Muliner Tourbillon, una pieza única y exquisita de oro macizo con los marcadores de los números terminados en diamante y una esfera de perla trabajada artesanalmente. Hasta ahí todo sería normal sino fuera porque el reloj es un opcional cuesta la friolera de ¡150.000 euros! Lo mismo que un Porsche 911 o dos BMW M4. Pero no es de extrañar teniendo en cuenta que el precio de partida del Bentayga ha quedado cifrado en 241.500 euros.
Con doble turbo
Precio que pagarás únicamente por conducir el único motor del que dispone y que no es otro que el descomunal W12 de 6 litros con doble sobrealimentación que entrega una potencia de 608 CV entre 5.250 y 6.000 rpm, con un par máximo de 900 Nm entre las 1.250 y las 4.500 rpm. Toda esa fuerza se transmite a las cuatro ruedas a través de una caja de cambios automática ZF de ocho velocidades gracias a la cual, pese a los 2.422 kilos del conjunto, permite al Bentayga acelerar de 0 a 100 km/h en sólo 4,1 segundos, logrando una velocidad máxima de 301 km/h. Más adelante, aunque aún sin fecha confirmada, se unirán una versión diesel y otra híbrida enchufable.
Como es obvio, el gasto de medio de semejante ‘bicho’ se dispara hasta los 12,8 l/100 km en ciclo mixto aunque, como ocurre con el reloj, es un dato que seguramente no le preocupe demasiado a su comprador. En lo que sí mostrará más interés será en su dinámica de conducción ya que el SUV inglés le brindará hasta ocho modos de conducción diferentes que se gestionarán a través del Bentley Dynamic Ride. Entre ellos hay uno exclusivo off-road que ajustará la altura, el nivel de dureza de los amortiguadores o la respuesta del motor, entre otros, para que la conducción fuera del asfalto sea mucho más placentera, porque a pesar de ser un vehículo ultra lujoso, no hay que olvidar que este es el primer todocamino de Bentley, y eso había que demostrarlo.