En primer lugar con la inclusión del motor 1.8 TFSI de 180 CV que, aunque parezca mentira, pasa a convertirse en el propulsor de acceso a la gama; y segundo, con el acabado especial S Line, el cual, ofrece un equipamiento de serie valorado en 7.500 euros pero sólo supondrá un sobrecoste de 2.900 euros. Según van pasando los meses, la tercera generación del Audi TT va cogiendo forma con el objetivo de convertirse, dentro de poco en una de las referencias de su segmento. Para ello, la marca alemana toma dos caminos distintos ya que, desafortunadamente, no podrán combinarse… al menos de momento.
El primero de ellos viene dado por la llegada de motor 1.8 TFSI de 180 CV el cual, además conseguirá rebajar la cuantía del modelo. Sí, porque este propulsor, con sus 180 ‘jacos’, se convertirá en el de acceso a la gama y estará disponible tanto con la carrocería coupé, desde 36.620 euros, como con la descapotable (Roadster), desde 39.510 euros. Pero además de por su precio, que supone una rebaja de 4.530 y 5,140 euros, respectivamente, si lo comparamos con el 2.0 TFSI de 230 CV, este 1.8 TFSI de 180 CV cuenta con unas prestaciones que no dejarán indiferente a ninguno de sus compradores.
Así, en la variante coupé acelera de 0 a 100 km/h en 6,9 segundos, logra una velocidad punta de 241 km/h y únicamente gasta 5,7 l/100 km de media; mientras que en el descapotable, los valores aumentan ligeramente hasta los 7,2 segundos, 237 km/h y 5,8 l/100 km, respectivamente. Esto supone ser un poco más lento que el 2.0 TFSI de 230 CV pero con la ventaja de que tendremos un vehículo más barato y ahorrador.
Por un tercio de su valor
La otra gran novedad de la gama TT es la llegada del siempre exitoso y llamativo acabado S Line, el cual ofrece de serie una larga lista de elementos sobre el modelo básico como las llantas de 18”, los espejos retrovisores calefactables y plegables eléctricamente, el sistema de aparcamiento trasero, la navegación MMI Plus, espejo interior antideslumbrante, sensores de luz y lluvia, tarjeta SD de 8 GB, cable USB y volante deportivo multifunción de 3 radios achatado.
Una línea que podrá ser equipada tanto el 2.0 TDI de 184 CV como en el 2.0 TFSI de 230 CV y cuya principal ventaja es que el precio final es 2,5 veces inferior en comparación a si lo montásemos de forma individual, pues únicamente habrá que sumar 2.900 euros al precio básico de cada uno de esos motores en lugar de los 7.500 euros en los que está realmente valorado…