Según Audi, esta tecnología tan cara se justifica por todo su desarrollo así como por la mayor seguridad visual que aportan y es que hablamos de un alcance ¡de casi un kilómetro! Audi anuncia que su R8 LMX es el primer vehículo del mundo que lleva a la serie los faros de láser, título muy discutido con el BMW i8, uno de los cupés híbridos que más darán de hablar en los últimos tiempos. Lejos de esta disputa que pasa a un segundo plano, el R8 los añade en su recta final de vida (es probable que en un año conozcamos a su sustituto) en una edición limitada que se pone a la venta en verano.
La tecnología del láser (que también la estrena el R18 e-tron que competirá los días 14 y 15 de junio en las 24 Horas de Le Mans) se basa en un módulo que comprende cuatro diodos láser, cada uno de 300 micrómetros que generan individualmente una longitud de onda de 450 nanómetros, lo que se traduce en un alcance de en torno a 800 metros. Esta luz láser sólo está disponible para la posición de largo alcance o carretera siempre que se circule por encima de 60 kilómetros/hora y complementa a las de posición, que son de led.
Cambios en el diseño
Dentro de la estética, este R8 LMX se diferencia de sus hermanos en detalles como el alerón fijo, el spoiler delantero y un conjunto de piezas realizadas en material plástico reforzado con fibra de carbono (las carcasas de los espejos retrovisores, la tapa del compartimento del propulsor…). En el habitáculo también se utiliza carbono mate para darle ese toque diferenciador (paneles de las puertas o salpicadero, entre otros).
Al margen de la iluminación, Audi se ha asegurado que el sobrecoste que hay que pagar por hacerse con uno de los 99 coches R8 LMX (que se pondrán a la venta a partir del verano) venga impuesto también por el motor elegido para la ocasión así como un equipamiento muy lujoso.
Todo un mundo
Así, se confía toda la parte motriz a la tracción integral quattro, al cambio automático de doble embrague S Tronic y a un V10 gasolina de 5.2 litros y 570 caballos. Con el arsenal del par que logra este bloque (540 Newton/metro), el R8 acelera de 0 a 100 kilómetros/hora en 3,4 segundos y alcanza una punta de 320 kilómetros/hora. Y aunque las cifras de consumo y emisiones no importen en un vehículo de estas características, ahí van: 12,9 litros y 299 gramos/C02. ¿Y qué pasa con la frenada? La dotación en este sentido recae en unos frenos de fibra de carbono de 380 milímetros tanto delante como detrás, con pinzas de aluminio bañadas en rojo. El paquete se completa con unos neumáticos específicos en medida 235/19 para las ruedas anteriores y 305/30 para las traseras, ambas con llantas de 19 pulgadas.
El afortunado propietario lo único que tendrá que elegir es el color: azul Ara efecto cristal o Gris Daytona mate.