Con 4,19 metros de largo, un interior tecnológico y muy habitable, un amplio abanico de asistentes de seguridad, una extensa gama de motores y una dinámica de conducción más que notable, este nuevo Audi está llamado a ser una de las referencias. Audi vuelve a situarse un paso por delante de sus principales competidores al ser la primera que lanzará al mercado un SUV urbano Premium. Finalmente se llamará Q2 (muchas voces apuntaban a la posibilidad de que se denominara Q1) y uno de sus objetivos será situarse como una de las referencias de su recién nacido sub-segmento.
Y es que, como decimos, de momento no hay ningún otro rival que presente sus mismas características. Cuenta con unas dimensiones compactas, con 4,19 m de longitud (20 menos que un Q3), 1,79 de anchura y 1,51 de altura, gracias al empleo de la plataforma modular MQB. Sin embargo, ello no impide que, internamente, ofrezca a priori una excelente habitabilidad que vendrá determinada por una distancia entre ejes de 2,6 metros y por un maletero que anuncia nada menos que 405 litros, es decir, 49 litros más que el Q3.
A la última
En lo que a diseño se refiere, la robustez externa se complementa a la perfección con un habitáculo a la última. Bien es cierto que su aspecto recuerda, y mucho, al de otros modelos de la gama, sobre todo al A1 y el A3, al incorporar una pantalla central retráctil, pero el pequeño SUV sobresale por ofrecer un elenco tecnológico de lo más completo. En este sentido, destaca la posibilidad de montar el Audi Virtual cockpit que sustituye el tradicional cuadro de relojes por una pantalla digital, el Head-Up Display o el sistema multimedia con punto WiFi.
Elementos a los que acompañara un amplio abanico de asistentes de seguridad como la frenada de emergencia automática en ciudad, el control de velocidad de crucero adaptativo, el asistente de tráfico cruzado, el lector de señales…
Seis mecánicas
Desde su llegada, prevista para este otoño, el Q2 podrá elegirse con una amplia gama de motores turbo de inyección directa repartidos a partes iguales entre diésel y gasolina. Los de gasolina tendrán una cilindrada de 1.0, 1.4 y 2.0 litros, siendo de tres cilindros el primero, y entregarán 116, 150 y 190 CV, respectivamente. Por su parte, la terna de propulsores turbodiésel, todos de cuatro cilindros, estará formada por un 1.6 TDI de 115 CV y dos 2.0 TDI, de 150 o 190 CV.
Todos equiparán de serie una transmisión manual de 6 velocidades, pero en opción podrán acoplar la caja de cambios automática S tronic de 7 velocidades. Además, en el caso de los dos más potentes, los 2.0 de 190 CV, tanto gasolina como diésel, transmitirán la fuerza a las cuatro ruedas a través del sistema de tracción integral quattro, sistema que será opcional en el caso de los 150 CV.
Adicionalmente, y como todo buen Audi que se precie, este Q2 también incorporará el selector de modos de conducción, Audi Drive Select, desde el cual, el conductor podrá variar el comportamiento de los diferentes elementos del vehículo (dirección, motor, cambio…) así como regular el grado de dureza de la suspensión adaptativa, siempre y cuando se equipe. Además, contará con un programa específico para circular por terrenos no asfaltados que cambiará el funcionamiento del sistema de tracción.
