Aún en fase de desarrollo pero sorprendentemente con todas las unidades ya vendidas (se fabricarán, como su propio nombre indica, únicamente 77) el Aston Martin One-77 está llamado a ser uno de los automóviles más increíbles y deseados del mundo. Su precio supera el millón de euros.
Los británicos han tirado aún más si cabe la casa por la ventana aplicando todos sus conocimientos y saber hacer con este modelo, inspirándose en los automóviles de competición alemanes que forman parte del DTM, uno de los campeonatos más apasionantes del mundo (y tecnológicamente más avanzados en lo que a sus bólidos se refiere).
Esta nueva obra de arte tiene una mecánica V12 de 7,3 l de cilindrada con una potencia que supera los 700 CV, una cifra que intimida al más osado, más aún cuando todavía no se conocen exactamente los datos definitivos. Se trata de una evolución del conocido propulsor que ya montan el Vantage, el DBS, o el DB9, pero con una cilindrada y potencia mucho más elevada y, sobre todo, con un peso un 25 % menor. Otra característica es que este motor se ubica 100mm más cerca del suelo que cualquier Aston Martin con una mecánica de 12 cilindros, manteniendo su disposición central-delantera. Las prestaciones que se anuncian están al alcance de muy pocos; de 0 a 100 Km/h en 3,5 segundos, con una velocidad punta superior a 325 Km/h.
Equipa una caja de cambios automática de 6 velocidades específicamente diseñada para este modelo, la cual incluye levas en el volante (fijas a la columna de dirección para facilitar una conducción deportiva). Otro de los aspectos más sorprendentes del One-77 es su chasis fabricado en fibra de carbono. Gracias a él, el peso del conjunto se sitúa en torno a los 1.500 Kg., una cifra nada elevada si tenemos en cuenta las características de esta máquina. La suspensión, de paralelogramo deformable en los dos ejes, cuenta con una configuración propia de algunos coches de competición.
Su arrolladora imagen está a la altura de su potencial. Destaca su prominente parrilla delantera, las entradas de aire del frontal o las enormes llantas de 20 pulgadas. Los neumáticos también han sido específicamente desarrollados para el One-77: son unos Pirelli P Zero Corsa en medidas 255/35 ZR20 delante y 335/30 ZR20 detrás.
Nadie discute que Aston Martin es uno de los fabricantes con más prestigio del mercado. Con el One-77 parecen haberse superado, fusionando en un coche de calle un diseño espectacular con la última tecnología procedente del mundo de la competición.