El 4C descapotable ofrece un estrechísimo hueco entre el parabrisas (hecho por completo de fibra de carbono) y el punto donde van montadas las barras antivuelco tras los asientos. El techo - practicable de forma manual - es de tela y piel y opcionalmente se puede pedir de fibra de carbono para aligerar el conjunto. En comparación con el modelo Coupé, el 4C Spider está hecho de aluminio y fibra de carbono reforzada para mantener toda la rigidez que hace falta. La pega es que esto ha supuesto un ligero aumento de peso (unos 10 kilos).
Además de disfrutar del aire fresco en nuestra piel, una de las mejores cosas del 4C Spider es la sonoridad que ofrece, capaz de deleitar a cualquier amante del ruido deportivo. En esta versión “a cielo abierto” los escapes de serie van en los laterales, igual que la variante coupé, dejando el escape central Akrapovic que vimos en el concept car como una opción dentro del catálogo.
Al conducir hay pocos cambios significativos. Detrás de los asientos se encuentra el motor de gasolina turboalimentado de 1.8 litros con 240 cv del coupé, el cual deriva su potencia al eje trasero a través de un cambio de doble embrague. El Spider es capaz de conseguir una aceleración completa hasta los 100 km/h en 4,5 segundos, mientras que su velocidad máxima es de 258 km/h, es decir, no hay cambios con respecto al modelo coupé. Su consumo, a cambio, es de 6,8 litros homologados y su precio de partida será de unos 55.000 euros en Alemania.