Ahora que la Fórmula 1 2022 acaba de dar el pistoletazo de salida, muchos seguidores seguro que se han quedado alucinados por cómo lucía el AMG GT Black Series que vuelve a pilotar Bernd Maylander. Sin embargo, la firma de la estrella parece que ya le ha buscado sustituto al AMG GT Black Series… para quien tenga siempre a mano un circuito eso sí. Porque los ingenieros de Affalterbach acaban de presentar el AMG GT Track Series que se convierte en el AMG GT más radical y potente del momento. Pero como te decimos en el titular, tiene una pega: y es que solo se podrá utilizar dentro de un trazado.
En efecto, el GT Track Series que estás viendo no está homologado para circular por carretera abierta como sí lo está el Black Series sobre el que se basa. Primero, basta con ver el interior, digno de cualquier monoplaza del Gran Circo: volante de competición, jaula antivuelco de acero de alta resistencia, celda de seguridad para el conductor de fibra de carbono, arneses de cinco puntos o una escotilla de rescate en el techo. También se han instalado un sistema de extinción de incendios, redes de seguridad para el conductor, así como una unidad de visualización del conductor programable por Bosch y un sistema avanzado de registro de datos.
En lo que a dinámica se refiere, los ingenieros germanos han dotado a este GT Track Series de amortiguadores Bilstein ajustables en cuatro vías que permiten realizar diferentes configuraciones tanto a baja como a alta velocidad dependiendo del tipo de trazado y así optimizar el rebote y la compresión, frenos de competición de acero, o un sistema ABS y un control de tracción también de competición con 12 modos de uso.
La guinda la pone una aerodinámica perfectamente trabajada, sin las ataduras que rigen la homologación de los vehículos de calle. En este sentido, propone llantas de 18 pulgadas, un splitter delantero más grande, tomas de aire laterales sobredimensionadas, salidas de ventilación en los pasos de rueda y en el capó o un alerón trasero ajustable realizado en fibra de carbono que aumenta todavía más la carga aerodinámica del Black Series.
En lo referente al motor, los ingenieros de AMG también han tenido libertad para mejorar ligeramente el ya de por sí excelente V8 biturbo de 4.0 litros que anima al GT Black Series. Las modificaciones efectuadas se ciñen al montaje de piezas de competición como los inyectores o a una ECU reprogramada. El resultado, exprimirle otros 14 CV y 50 Nm al bloque para generar un total de 734 CV y 850 Nm. Un incremento de rendimiento que unido a una nueva gestión del cambio secuencial de competición Hewland HLS con un diferencial ajustable que permite gestionar la potencia que llega a las ruedas traseras permitirá a su afortunado conductor sentirse como el mismísimo Maylander.
Y decimos lo de afortunado porque Mercedes-AMG ha anunciado que s__olo fabricará 55 unidades para todo el mundo__ de este descomunal deportivo de circuito, en otro guiño más a los 55 años de vida que cumple AMG. El precio de cada una de estas unidades está valorado en 395.000 euros sin impuestos.