Aunque solo se fabricaron 500 unidades y ya hace más de 10 años, el Lexus LFA es uno de esos coches que se han convertido en auténticos mitos dentro de la industria automovilística.
Un deportivo extremo “made in Japan” que nació para competir con los mejores representantes de Europa (Porsche, Ferrari, Lamborghini…) y para que Lexus demostrara que no solo sabía fabricar automóviles de lujo, sino rabiosos coches de altas prestaciones.
0 a 100 km/h en 3,7 segundos y 325 km/h de punta
Ahora, un Lexus LFA de 2012, acaba de ser vendido en subasta por Bring a Trailer con un precio de locura, que duplica el que tenía cuando se vendía nuevo hace más de una década.
La unidad subastada, pintada en rojo, contaba con menos de 432 km recorridos, lo que le ha servido para venderse por algo más de 825.000 euros, el doble de su precio original, que rondaba los 411.000 euros.
El Lexus LFA combinaba un magnífico diseño que no ha pasado en absoluto de moda con un potente motor V10 de 4,8 litros que sigue pareciendo tecnológicamente avanzado. Este propulsor lograba una potencia máxima de 560 CV a las 8.700 rpm y un par máximo de 480 Nm a las 6800 rpm y era capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 3.7 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 325 km/h.
El ejemplar que nos ocupa data del último año de producción del coche (se fabricó entre 2010 y 2012) y está acabado en una brillante capa rojo de Absolutely Red sobre un interior de cuero en tono crema (muy Ferrari, ¿verdad?). Posee, además, asientos calefactados y ajustables eléctricamente en 10 posiciones, detalles en fibra de carbono en el salpicadero y los paneles de las puertas.
El equipamiento incluye climatizador automático, sistema de sonido envolvente Mark Levinson con 12 altavoces, equipo de música con CD, conectividad Bluetooth, sistema de asistencia en pendiente y pantalla de infoentretenimiento Lexus Insider con control por voz, navegación y cámara de marcha atrás.