Lo más importante radica en que propone 2 sistemas de propulsión: uno híbrido "enchufable" u otro de pila de combustible... El Mercedes F 800 Style, nombre con el que ha sido bautizado este concept car, muestra el futuro de los automóviles de lujo desde un enfoque completamente nuevo, aunando con maestría los valores tradicionales de la firma en el campo del diseño, la seguridad, el confort y las prestaciones, con las tecnologías de propulsión alternativas y los avances aplicados a la ecología del automóvil.
Como decíamos, lo más interesante de este prototipo es que está desarrollado para alojar dos sistemas de propulsión, bien mediante un sistema híbrido formado por un motor de gasolina y otro eléctrico (la firma asegura que la próxima generación de su Clase S híbrido tendrá soluciones técnicas muy parecidas a este) o por medio de uno de pila de combustible.
La versión híbrida combina un propulsor V6 de 3.5 litros de inyección directa de gasolina y 300 CV con un motor eléctrico de 109 CV. Este va ubicado entre la caja de cambios automática de 7 velocidades (7G-Tronic) y el motor térmico y puede funcionar de manera autónoma o como complemento al de gasolina. Con la energía almacenada en las baterías de ión-litio (el F 800 Style permite recargarlas mediante una toma de enchufe doméstica convencional), esto es, usando únicamente la propulsión eléctrica, el vehículo puede recorrer hasta 30 km y desarrollar una velocidad máxima de 120 km/h. Cuando ambos motores trabajan en conjunto, el F 800 Style acelera de 0 a 100 km/h en sólo 4,8 segundos y alcanza una punta de 250 km/h. Su consumo homologado es digno de alabar; 2,9 de media a los 100. El depósito del vehículo es de sólo 45 litros, pero la autonomía aproximada se cifra unos 700 Km.
Por su parte, el sistema de la variante con pila de combustible de hidrógeno, está formado por cuatro depósitos de hidrógeno, una batería de ión-litio, la propia pila y un motor eléctrico que declara 136 CV de potencia. La reacción química del hidrógeno con el oxígeno libera la energía eléctrica que sirve para alimentar al motor y para recargar la batería. La autonomía es de unos 600 Km. y se anuncia una velocidad máxima de 180 Km/h. El Mercedes B Fuel Cell (más…) que Mercedes tiene previsto comercializar a lo largo de este año, funciona con este tipo de sistema de propulsión.
Nuestro protagonista mide 4,75 metros de longitud y tiene una distancia entre ejes de 2.924 mm. Posee cinco plazas en su interior y una de sus grandes peculiaridades es que las puertas traseras son correderas. Los asientos están fabricados con magnesio, fibra de carbono, tela y madera. Otro de los elementos que más llama la atención dentro del habitáculo es su nueva interfaz Cam-Touch-Pad (reconoce los movimientos de los dedos sobre la superficie de un panel táctil) para acceder y controlar las funciones del climatizador, el navegador, teléfono, el sistema de audio o la conexión a Internet. En el navegador destaca una función denominada “Range on Map”, que muestra el radio de acción disponible con la carga de la batería en una vista de 360° alrededor del mapa de carreteras para hacernos una idea más o menos precisa de hasta donde se puede ir con la autonomía disponible.
Por último, el F 800 Style incorpora una evolución del programador de velocidad activo “Distronic Plus”. Este dispositivo incluye ahora una especie de asistente de conducción en retenciones, en el que el control crucero activo es capaz de mantener la distancia respecto al coche delantero, incluso a velocidades muy bajas, llegando a detener el coche si es necesario. La peculiaridad es que también es capaz de seguir al coche precedente y tomar curvas de forma automática por debajo de 40 km/h sin intervención alguna por parte del conductor (ni si quiera es necesario tocar el volante.)
El Mercedes F 800 Style podrá verse por primera vez en el Salón de Ginebra. La marca afirma que se trata de un vehículo cuyas innovaciones han alcanzado ya un grado muy avanzado de desarrollo, casi apto para su implementación en vehículos de serie.