El secreto de este biplaza reside en un chasis con carrocería de cuatro piezas y en un diseño exterior definido por una tela flexible y tensada que deja al descubierto muchos de los elementos mecánicos. Es la interpretación del futuro hecha por Bmw… El Gina Lightvision Model es un descapotable biplaza realizado con un chasis de aluminio entramado muy ligero. No tiene las estructuras típicas de un coche (como pueden ser las puertas, los pasos de rueda, el techo o la tapa del maletero) sino que cuenta con cuatro elementos básicos: una pieza que abarca desde el frontal hasta la base del parabrisas, otra hasta el límite posterior de las puertas, unas piezas laterales desde la base de los umbrales delanteros hasta la zaga y otra formando la parte central de la zaga del coche.
Estas cuatro piezas no son fijas, sino que pueden moverse en función de las necesidades del coche. Por ejemplo, en una mayor demanda de aerodinámica, la parte trasera elevará el alerón para crear más carga aerodinámica en el eje posterior sin dejar al descubierto el mecanismo que lo activa y conservando la homogeneidad gracias a la tela que recubre el exterior del coche. Lo mismo ocurre con la refrigeración del motor, que puede estar más o menos asistida (por la primera de las piezas) en función del modo de conducción.
Los faros son otra de las cosas más llamativas de este proyecto. En condiciones con suficiente iluminación, las ópticas van escondidas tras la tela que recubre el coche. Cuando el conductor activa las luces, esta tela se retira dejando dos huecos adaptados a los faros que vuelven a recogerse al desconectar las luces (puedes comparar esta foto con la primera para comprobar el proceso).
Plena interacción
Lo más interesante de este prototipo es la interacción que existirá entre el coche y el conductor. Gracias a un sistema de memorización, el volante y el asiento del conductor quedan recogidos (cada uno hacia un lado) para facilitar el acceso al interior. Una vez dentro, el reposacabezas se separa del respaldo, la columna de dirección despliega el volante hacia el conductor y el asiento se acerca hacia el cuadro de mandos. La palanca de cambios se encuentra en la columna central que separa los asientos y está envuelta por otra superficie textil tensada.
El motor se arranca con la función Strart/Stop, aunque no sabemos si será exactamente la misma que ya existe en los modelos comercializados. Además de este, Bmw ha incluido otros elementos del mercado actual como el iDrive situado en la consola central.
¿Será esto resistente?
Pero ¿de que está compuesto este tejido? Bmw asegura que el departamento encargado de diseñar la “piel” del GINA ha sido el responsable de diseñar los asientos en los coches comercializados hoy en día. Este equipo eligión, finalmente, un tejido industrial híbrido formado por un entramado portante y por una capa superior resistente al frío, al calor y también al agua. También han asegurado que es resistente a la dilatación y, por tanto, no importa las veces que abramos y cerremos las puertas (al parecer es lo único que forma arrugas) ya que no quedarán marcas.
El teórico capó (o mejor dicho el acceso al motor) se puede hacer por la parte frontal cuando el tejido se abre y deja una abertura de un metro de ancho en el frontal. Esta deja acceso a las bocas para rellenar el aceite, el refrigerante y el agua de los limpiaparabrisas.
El GINA Lightvision model contará con un equipamiento propio de un coche de alta gama. Las llantas son de 20 pulgadas, tiene doble salida de escape traseras, una luz de freno integrada en el alerón trasero y difusores fabricados en fibra de carbono.