Está ya disponible en los concesionarios de la firma francesa a partir de 15.150€. Después de las versiones cinco puertas y coupé del Citröen C4, a la marca francesa le faltaba una versión sedán para completar la oferta de uno de sus coches más exitosos en los últimos años. El C4 de tres volúmenes mantiene la estética de sus hermanos, añadiéndole una trasera caracterizada por dos grandes ópticas en forma de boomerang. Entre ellas se encuentra un maletero de 513 litros, uno de los grandes atractivos del modelo junto a su espacioso interior.
Interior espacioso y perfumado
Una longitud cercana a los cinco metros y una distancia entre ejes de más de dos metros y medio son los principales responsables de la destacada habitabilidad del C4 Sedán. Esta característica se hace patente principalmente en el espacio disponible para las piernas en las plazas traseras, que es muy superior al resto de vehículos del segmento C.
Además, aparte de la destacada capacidad del maletero, la última versión del C4 dispone de numerosos compartimentos repartidos por todo el habitáculo que facilitan el transporte de objetos de pequeño tamaño. Es el caso de la guantera iluminada y climatizada, los compartimentos en las puertas delanteras y traseras, y el compartimento situado bajo el apoyabrazos central.
El elemento más curioso que contribuye al confort a bordo del C4 Sedán es un perfumador de ambiente integrado en el salpicadero, que difunde su aroma por todo el habitáculo gracias al sistema de ventilación. Además es posible cambiar la fragancia del perfumador debido a la existencia de cartuchos individuales de distintos olores.
Puesto de conducción ergonómico
Otro elemento importante en la sensación de confort que transmite el interior del nuevo C4 Sedán es el volante con mandos centrales fijos. Es regulable en altura y profundidad y permite dirigir fácilmente los sistemas de audio y de limitación y regulación de velocidad. Estos mandos están conectados con la pantalla translucida situada en el centro del salpicadero, cuyo contraste se ajusta de forma automática para facilitar la visualización de los datos más importantes para la conducción. Se trata de una buena muestra del nivel tecnológico del C4 Sedán, que también se hace notar en el sistema de frenos, que cuenta con repartidor electrónico de frenada, ABS, ayuda a la frenada de urgencia, ASR y ESP.
Solo un diésel y un gasolina
Una de las principales desventajas del C4 Sedán frente a sus competidores es la escasa oferta de propulsores que tiene disponible. Mientras en el Ford Focus Sedán se puede elegir entre tres motores gasolina y cuatro diésel, en el Citröen solo se puede escoger entre un gasolina 1.6 16V 110 CV con par motor de 147 Nm, y un diésel HDi 110 CV con filtro de partículas (FAP) y un par motor de 260 Nm. Además el coche francés solo monta una caja de cambios manual de cinco velocidades, frente a las tres transmisiones diferentes disponibles en el norteamericano.
A pesar de ello, se trata de un coche muy atractivo debido a su reducido precio de base, que le sitúa unos dos mil euros por debajo del Focus Sedán. Los 15.150€ de la versión más barata del Citröen C4 lo convierten en un vehículo muy apetecible para los que quieran disfrutar de un coche con una gran habitabilidad a un precio muy competitivo.
(El C4 Sedán está fabricado sobre la misma plataforma que el C4, por lo que incorpora todos los equipamientos de seguridad de este automóvil. Así, el C4 Sedán tiene una calificación de cinco estrellas en los test EuroNCAP para la protección de pasajeros y tres estrellas en la protección de los peatones)
