Dicen que el dinero no da la felicidad pero ya te aseguro yo que uno acaudalado propietario es hoy una de las personas más contentas del planeta porque tiene aparcado en su casa el mítico Toyota Supra de la saga Fast&Furious, el mismo que era propiedad de Brian O’Conner (Paul Walker).
La casa de subastas Barret-Jackson acaba de celebrar en Las Vegas, un evento en el qe el gran protagonista ha sido el deportivo japnés de color naranja. La puja ha estado reñida pero finalmente ha caído del lado de un ricachón que ha tenido que 'aflojar' una importante cantidad de dinero para llevárselo a casa.
El precio final, agárrate porque te va a dejar boquiabierto: 550.000 dólares qu, para que hagas el cambio, se trata de nada menos 463.400 €. Una auténtica barbaridad para muchos aunque lo cierto es que se ha llevado una auténtica joya de la industria cinematográfica (también apareció en la segunda y la tercera parte) así como una joya del tunning.
Entrando en detalle, comentarte que para el exterior se eligió la__ misma pintura perlada Candy Orange que equipan los Lamborghini Diablo__ mientras que los vinilos presentan los gráficos icónicos "Nuclear Gladiator" en los laterales. El resto de mejoras visuales se centran en un kit de carrocería Bomex, capó estilo TRD, un alerón trasero biplano de aluminio APR y llantas Dazz Motorsport Racing Hart M5 de 19 pulgadas.
El interior parece perfectamente cuidado gracias a que su interior apareció varias veces en la gran pantalla. Volante, asientos y botonera parecen haber aguantado el paso del tiempo. El único elemento cuestionable es la palanca de cambios manual de imitación dado que este coche tiene una transmisión automática de cuatro relaciones.
Ahora bien, llegados a este punto tenemos que darte una mala noticia. No, no es que te vaya a ser casi imposible hacerte con él, sino que si esperabas mejoras mecánicas te vas a tener que quedar con las ganas. Este Supra no es como el que Brian conducía en la peli, totalmente modificado en este aspecto, sino que mantiene el bloque de serie, es decir, un seis cilindros en línea de 3,0 litros turboalimentado combinado con la comentada caja automática.
Estaremos atentos al precio de partida que estipula Barret-Jackson para la subasta pero, sobre todo, a la cuantía que se acaba pagando por este Toyota Supra de Brian O’Connor.
