A principios de 2009 podría estar circulando por las calles… Ford está probando durante estas semanas en el circuito de Nürburgring el prototipo del que nacerá el nuevo Focus RS: un modelo que se convertirá en el más deportivo de la gama y que tendrá de esta forma convertida en realidad su segunda generación. De momento todavía siguen con el trabajo de desarrollo que, según Ford, va para varios meses más.
Evidentemente, ya parte de las mejoras en la puesta a punto del chasis, lo que caracteriza a este coche es su motor: un Duratec 2.5 puesto a punto (es el mismo del ST) para que supere los 280 cv de potencia. La diferencia es de 55 cv con respecto a la versión más potente ahora en el mercado: las cifras que maneja el ST son de 225 cv de potencia, 9,3 litros de consumo en ciclo mixto y una aceleración de 6,8 segundos. Con la notable mejora de la relación peso potencia la versión RS pulverizará (al alza y a la baja) estos dos parámetros y disparará los niveles de adrenalina al volante.
Nada más hasta Londres
Su aparición definitiva será en el próximo salón del Automóvil de Londres. De momento no se conocen muchos mas datos sobre este prototipo, aunque la marca ha desvelado que su equipo trabaja sobre todo en maximizar los resultados del sistema de tracción delantera, que irá combinado con un diferencial autoblocante. El par motor que genera su propulsor es de 400 Nm (el ST da 320 a partir de las 1600 revoluciones).
El precio que tendrá en el mercado tampoco se conoce, aunque viendo las numerosas mejoras y teniendo en cuenta lo que cuesta el actual ST (unos 25.000 euros) es muy poco probable que el coste total baje de los 30.000 euros.
El desarrollo del nuevo Focus RS se lleva a cabo de forma conjunta entre el Centro Avanzado de Ingeniería que Ford tiene en Aachen y la sede del equipo RS en Colonia. Gran parte del trabajo aplicado en este coche procede también de los programas Motorsport que se utilizan en el coche de competición (Focus WRC).