La firma de los cuatro aros, consciente del genial trabajo que ha logrado con la nueva generación del Audi RS3, ha querido corroborar con tiempos objetivos el enorme paso adelante que el modelo ha experimentado en cuanto a agilidad y dinamismo. Y qué mejor que acudir al mítico trazado de Nürburgring Nordschleife para que, además de demostrar su valía sobre el asfalto más difícil que hay en la faz de la Tierra, hagan testigos a todo el mundo de una gesta maravillosa. Sí, como estaréis imaginando, tenemos nuevo rey en el ranking de los compactos más rápidos del Infierno Verde. El RS3, en concreto su versión sedán, ha arrebatado el trono del Megane RS Trophy-R marcando un tiempo por vuelta de 7:40,748 minutos (casi cinco segundos menos que el deportivo francés.)
El único ajuste que los ingenieros tuvieron que realizar antes de lanzarse a completar la vuelta fue adaptar la presión de los Pirelli PZero Trofeo R que montaron para la ocasión, unos neumáticos prácticamente de competición que garantizaban una motricidad máxima. Por lo demás, el coche estaba completamente de serie.
¿Cuál es el secreto del Audi RS3 2021?
Si bien es cierto que el nuevo RS3 no aumenta el caballaje de su cinco cilindros con respecto al anterior modelo (se queda en los mismos 400 CV que daba antes), sí cuenta con un as bajo la manga: la implementación del sistema Torque Splitter, un mecanismo con el que, según Audi, consigue enviar más par al eje trasero y reducir el subviraje en curva. Con ello, según el piloto Frank Stippler, se obtiene un coche mucho más ágil desde la mitad de la curva hasta su final y también al acelerar a la salida de las curvas. ¡Y todo sin renunciar a los derrapes en un tracción total! Bendita tecnología...