Alcolock es el nombre con el que se conoce el nuevo dispositivo cuya preinstalación es obligatoria desde el 1 de julio de 2022 en todos los vehículos de nueva homologación en la Unión Europea.
El alcolock es un sistema que impide la puesta en marcha del vehículo si no se supera un test de alcoholemia. Antes de la puesta en marcha, el conductor debe realizar un test. Si el resultado supera el límite legal, el sistema bloquea el encendido y el vehículo no puede ponerse en marcha, lo mismo que si no se realiza el test o no se hace correctamente. Si el test da como resultado un nivel de alcoholemia inferior al límite legal, se permite el arranque del vehículo.
La nueva legislación obliga a que todos los vehículos de nueva homologación equipen la preinstalación del alcolock. No los vehículos nuevos, sino aquellos nuevos modelos que vayan a ser sometidos a las homologaciones pertinentes para su nuevo lanzamiento al mercado.
Quienes están obligados a usar alcolock
Por ahora la ley obliga sólo a la preinstalación en todos los vehículos de nueva homologación en la Unión Europea, y cada país regula qué conductores o tipos de vehículos deberán incorporar también el dispositivo completo.
La reforma de la Ley de Tráfico aprobada hace unos meses a finales de 2021 ya contemplaba el alcolock y establece la obligatoriedad de su uso en todos los vehículos homologados como M2 y M3 destinados al transporte colectivo y que dispongan de la preinstalación pertinente.
El uso de alcolock ya es obligatorio desde hace tiempo en algunos países como Suecia. Lo que se busca con este sistema es reducir las víctimas mortales en accidentes de tráfico. Según las estadísticas, en 2021 el 45,5% de los fallecidos en carretera presentaban índices de alcoholemia superiores a los establecidos por la ley.