Lo ideal es comprar un pincel de retoque en el concesionario, indicando el código de color de la pintura en cuestión. Si no hay posibilidad de hacerlo, una pintura genérica también servirá, solo hay que elegir bien su color e intentar que se aproxime al máximo al tono del vehículo. Para dar con el color deseado sin mayores quebraderos de cabeza, lo mejor es visitar una tienda especializada en recambios: en este tipo de establecimientos siempre existe una gran oferta de pinturas de toda la gama cromática que además se venden en forma de rotuladores de fácil aplicación.
Cómo preparar la superficie antes de usar la pintura para arañazos del coche
Antes de aplicar el producto es importante lavar y secar minuciosamente el coche, puesto que los restos de suciedad dificultan la adherencia de la pintura. El siguiente paso es lijar suavemente el arañazo para nivelar la superficie de trabajo, pero sin llegar a las capas más profundas. Es importante pulir siempre en el sentido de la rayadura para no crear nuevos arañazos en la dirección opuesta. A continuación, se limpia y se seca el área de pulido utilizando bayetas de microfibra limpias y de buena calidad. No se recomienda usar trapos de algodón para esta tarea, ya que pueden arañar aún más la carrocería.
Cómo aplicar la pintura para quitar los arañazos del coche
Una vez lista la superficie a tratar, se le aplicará la pintura y se dejará secar durante 6-8 horas. Si hay un desnivel visible entre la pintura original y la del arañazo, se recomienda aplicar dos, tres o tantas capas de producto como se desee para rellenar la rayadura. Eso sí, antes de aplicar la siguiente capa, es conveniente dejar que se seque bien la anterior, y así sucesivamente. También es muy recomendable pulir los bordes de trabajo después de cada aplicación de la pintura para arañazos del coche. Y para lograr un resultado profesional, la mejor técnica en la aplicación del tinte radica en dar pequeños golpecitos.
Cómo fijar la pintura para arañazos
La etapa final en el tratamiento contra rayaduras consiste en la aplicación de una laca antiarañazos para coches. Su fórmula ayuda a fijar bien la pintura, volverla más resistente ante el desgaste diario y evitar que desaparezca después de unos pocos lavados. Además, este tipo de lacas protegen la carrocería del coche contra arañazos en túneles de lavado o durante el secado con paños que no sean de microfibra.