Después del invierno, su coche se merece una limpieza a fondo. Es especialmente necesaria una limpieza de los bajos para limpiar la sal, la suciedad y el polvo. La mejor manera de hacerlo es en un túnel de lavado que ofrezca un programa para limpiar los bajos. También debe revisar todas las gomas y selladores de las puertas, ya que algunas veces se agrietan debido al frío y a la sal. También hay que llenar los depósitos de líquidos de limpieza ya que a menudo suelen vaciarse durante el invierno. Antes del invierno, debe hacer que su vehículo esté completamente a punto. Esto incluye llenar el depósito del agua y poner anticongelante. Rocíe los sellos de goma con aceite de silicona, para que estén bien protegidos contra el frío y la sal en invierno. La mejor prevención contra la sal y la humedad la proporciona un sellado correcto de los huecos. Esto se ofrece en numerosos talleres especializados. Básicamente, debe limpiar con mucha más frecuencia su vehículo en invierno que en verano. La suciedad y la sal no se deben dejar durante meses en el vehículo, ya que lo estropean. Además, asegúrese de que tiene los neumáticos de verano y de invierno montados de forma apropiada. Los neumáticos de invierno son un requisito legal en determinadas circunstancias.