Su continuidad es la mejor muestra de que estamos ante una de las medidas más eficaces para impulsar un mercado en niveles de los años 90.
Aunque si bien es verdad que ha mantenido su esencia: ayudas directas a la compra para particulares, pymes y autónomos, aquel PIVE 1 que nacía en octubre del año pasado ha sufrido una evolución con respecto al que está actualmente en vigor.
De esta forma, con el Plan PIVE 2 desapareció el apoyo al vehículo usado sin que se consiguiera recuperar en las siguientes prórrogas. Además, se reducía a diez años la edad del turismo a entregar a cambio de los 2.000 euros de descuento, que ascienden a 3.000 en el caso de los coches para familias numerosas.
Con el Plan PIVE 3, de idénticas condiciones al plan actual, llegaban también las ayudas para los vehículos adaptados a las personas con movilidad reducida y que, como viene siendo habitual, se reparten al 50% entre los fabricantes y el Estado, para quien estos planes suponen una inversión con un amplio retorno fiscal: por cada euro invertido se recuperan tres vía impuestos.
En la infografía que te presentamos a continuación, podrás ver la comparativa de estas cuatro ediciones en un solo golpe de vista: