Al igual que en otros muchos casos, es necesaria la obtención del Certificado de Aptitud Profesional (CAP) si quiere emplearse con fines profesionales. El permiso de conducir D1 también requiere que el interesado tenga, al menos, 21 años.
¿Qué vehículos es posible conducir con el permiso D1?
El permiso D1 faculta al titular para conducir todo tipo de automóviles que hayan sido construidos y diseñados para el transporte de pasajeros. En concreto, la cantidad máxima de personas que puede llevar el conductor es de 16. Además, el vehículo no puede poseer una longitud superior a los 8 metros, aunque están capacitados para llevar remolques cuya Masa Máxima Autorizada (MMA) no supere los 750 kg. Su obtención implica la concesión automática del ya extinto permiso BTP, el cual daba derecho a conducir taxis, ambulancias y vehículos de policía, bomberos y transporte escolar.
Requisitos para la obtención del permiso de conducir de clase D1
Aquellos que deseen ser titulares de un permiso D1 deberán someterse a tres exámenes divididos en dos fases. La primera de ellas es teórica y consta de una prueba de tipo test de 20 preguntas que debe completarse en un período máximo de 20 minutos y que, para ser aprobado, no puede contener más de dos fallos. Por su parte, una vez que el alumno lo haya superado, tendrá que presentarse al examen práctico, el cual consta de dos ejercicios. El primero de ellos se desarrolla en un circuito cerrado y trata de sacar a relucir las habilidades del conductor a la hora de realizar determinadas maniobras complejas. El segundo consiste en un tiempo determinado conduciendo en una situación de tráfico real.
Por otro lado, el conductor debe contar con, al menos, 21 años en el momento de presentarse a las pruebas conducentes a la obtención del carnet de conducir de la clase D1. Además, debe ser poseedor del permiso de clase B, es decir, aquel que da derecho a ponerse al volante de la mayoría de turismos y motocicletas de cilindrada inferior a los 125 cc. También necesita abonar las correspondientes tasas, las cuales oscilan en torno a los 90 euros y superar un reconocimiento médico para conductores en un centro homologado por la Dirección General de Tráfico.