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Pontiac Trans Am de un vistazo
Encuentra aquí una descripción general completa del automóvil Pontiac Trans Am, incluyendo detalles sobre las características más importantes, el motor, el equipamiento y otras informaciones útiles relacionadas con el modelo de automóvil. Lee mas
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Modelos alternativos
El modelo Trans Am pertenece a la segunda de las cuatro generaciones del Pontiac Firebird. Su primera versión fue lanzada en el año 1969, y presumía de color blanco con barras azules, del estilo de los coches de carreras. Mostraba grandes cambios en el aspecto exterior con respecto a los Pontiac Firebird que se venían fabricando, y dio lugar a una nueva generación de los vehículos Firebird. Las modificaciones más salientes fueron sus innovadoras líneas laterales, la parrilla delantera, el panel trasero y varios detalles del interior. Este flamante coche de alta potencia, que se bautizó como Pontiac Firebird Trans AM, se presentó en sociedad equipado con un motor V8 Ram-Air. En cada una de sus versiones los Trans Am siempre contaron con motores poderosos, torques brutales y aceleraciones de vértigo, en modelos de líneas deportivas que hasta hoy aceleran el pulso a los apasionados por los coches de segunda mano de diseño muscle car.
Los cambios en el tiempo del Pontiac Trans Am
La versión Trans Am del año 1977 destaca por la evolución en el aspecto exterior de este emblemático modelo. El Firebird Trans Am apareció ese año con un nuevo diseño del frontal, con líneas también renovadas y más suaves que las de su antecesor, aunque conservaba ese matiz agresivo, aún más acentuado, que caracteriza a la marca y al modelo. En cierto sentido, se trató solo de una versión más, siempre dentro de la gama alta de Pontiac, pero fue lanzado al estrellato gracias a la película "Smokey and the Bandit", que lo catapultó al rango de objeto de culto por parte de coleccionistas y amantes del motor. Actualmente se cotiza tremendamente en el mercado de los coches usados, y es buscado por los sibaritas de los coches clásicos. Otro cambio destacado del Pontiac Trans Am puede observarse en el año 1982. Esta versión fue ensamblada para rivalizar en ventas con el Corvette Hatchback, y lucía una suspensión más avanzada y aún más agresiva que sus anteriores versiones. Una de sus peculiaridades más llamativas era la nueva ventana trasera de cristal, con apertura tanto para el modelo sedán como para el descapotable. El famoso coche fantástico, que aparecía en la serie televisiva Knight Rider es, justamente, un Pontiac Trans Am modelo 1982, todo un ejemplo de deportividad, velocidad y músculo. Incluía un motor V8 de 7459 cc y ostentaba una potencia de 310 CV. Este sublime modelo del Trans Am podía alcanzar una velocidad máxima de 211 kilómetros por hora, con una aceleración de 0 a 100 km/h en apenas 5,4 segundos. Su estructura se sustentaba en un chasis monobloque con alerón trasero, frenos delanteros de disco, llantas de aluminio de 15 pulgadas y cambio manual o automático de 4 y 3 velocidades respectivamente. Posteriormente a este modelo, y para celebrar el 20 aniversario de la línea Firebird, Pontiac lanzó la edición especial Trans Am convertible, un modelo diferenciado de color blanco y cargado de elegancia.
Motores que han hecho rugir a los Pontiac Trans Am
Hasta el año 1977, todos los modelos de Pontiac, inclusive el Firebird Trans Am, incluyeron un motor ensamblado en la misma fábrica Pontiac. A partir de entonces, los distintos modelos de Firebird fueron construidos con motores de General Motors, situación que se prolongó hasta el año 2002. Los motores que han dado vida a los Pontiac Trans Am han sido dos big block. El más común, un 6.6 litros de 6555 centímetros cúbicos, V-8 de 200 CV, que era el motor estándar que se ofrecía en 49 estados norteamericanos. El otro era un 6.6 Oldsmobile de 6604 centímetros cúbicos, 185 CV, que solo se montaba en California o en los condados situados a gran altitud. Aún es posible encontrar estas motorizaciones en algunos modelos que se ofrecen en las tiendas de coches de segunda mano, y son verdaderamente buscadas por quienes aprecian los motores de gran potencia.