Saltar al contenido principal
En estos momentos, los servicios que ofrece AutoScout24 están limitados por trabajos de mantenimiento. Esto afecta a algunas funciones, como el contacto con los vendedores, el inicio de sesión o la gestión de los vehículos para la venta.
mini-banner-l-01.jpg

Mini Roadster

Mini Roadster

Hasta que en 1999 la compañía Britidh Motor Company fue absorbida por la BMW no se había fabricado un modelo descapotable en ninguna de sus modalidades, a no ser que fuera de forma particular en talleres privados. A partir del 2001, el legendario mini tomó su denominación actual, la de MINI, aceptando un salto evolutivo de una nueva raza.

Interesado en el Mini Roadster

Aún con todo, no apareció el primer descapotable de la marca hasta el 2004, con su modelo Cabrio de cuatro plazas, el cual se puede considerar como el auténtico predecesor del MINI Roadster. El aspecto impecable de este primer Cabrio era todo un hito dentro del mundo del motor y de los coches utilitarios. Un motor considerable, un diseño innovador, cuatro plazas y todo un universo de conducción al volante se integraba en un mercado abierto a las nuevas necesidades de los amantes del motor. No fue hasta el año 2012 cuando la especie volvió a evolucionar. Un nuevo y extraordinario MINI biplaza descapotable aparecía en el horizonte, y no era otro que el MINI Roadster, el sexto modelo de la gama MINI de BMW. Este modelo estaba basado en MINI Coupé y era el primer mini biplaza con capota de la historia.

Un coche reducido con un gran motor bajo el capó

Una longitud de 3,72 metros, una altura de 1,38 y una anchura de 1,68 metros es todo lo que el MINI Roadster necesita para hacer las delicias de cualquier conductor. En realidad, estas medidas son exactamente las mismas que posee el MINI Coupé, lo que deja patente el hecho de son prácticamente el mismo coche, aunque uno de ellos sea descapotable. Incluso el alerón trasero que se despliega a 80 km/h es el mismo elemento que mantiene el equilibrio en ambos modelos, proporcionando una carga de estabilidad de hasta 40 Kilos. Una de las principales diferencias entre estos dos prodigios de la mecánica alemana son los refuerzos estructurales del MINI Roadster para rigidizar su carrocería hasta alcanzar la misma seguridad que proporciona su pequeño hermano Coupé. Otra diferencia a tener en cuenta es el tamaño del maletero. El MINI Roadster pierde 40 litros de capacidad con respecto al Coupé, aunque claramente merece la pena el sacrificio de espacio a cambio de la aerodinámica y el estilo impecable que presenta. Su capota de lona es manual y queda escondida tras los arcos de seguridad de la estructura. En definitiva, no hay concesionario de coches de segunda mano que no quiera tener un par de estas joyas para atraer la atención de sus clientes.

Un MINI Roadster para cada estilo de conducción

Existen hasta cuatro motores diferentes para esta maravilla de la carretera. El MINI Cooper, el Cooper S, el John Cooper Works y el Cooper SD. Tanto el S como el SD tienen la opción de cambio manual o automático, ambos en seis marchas. El primero de ellos y el más comedido, el Cooper, es un 1,6 litros y posee 122 CV con un par máximo de 160 Nm. El segundo en potencia es el S, con 184 CV, 4 cilindros y un par máximo de 260Nm., alcanzando hasta los 227 Km/h. El John Cooper Works tienen un motor gasolina de 1,6 litros que ofrece 211 CV y logra los 237 km/h. En cuanto al único modelo diésel, el Cooper SD Roadster, incorpora un motor de 143 CV con un par máximo de 305 Nm. Cualquiera de estos cuatro modelos de MINI Roadster, en la modalidad de coches usados o segunda mano, son una garantía de eficacia, seguridad, confort, estilo y forma de vida en general.