Kia Sephia

El diseño original del Kia Sephia se caracterizó por su frontal acabado en cuña, en el que se destacaban unos alargados faros, y una trasera de líneas muy rectas que daba el carácter y la personalidad a un vehículo usado que puede encontrarse con carrocerías de 4 puertas de estilo sedán o con otras de 5 puertas pertenecientes a la clase hatchback. De este modo, el Kia Sephia se presentó como una opción ideal para los interesados en poseer un coche de líneas sencillas y que recordase a la elegancia de un sedán clásico pero que, además, quisieran contar con las versatilidad de los utilitarios más urbanos.

Dos generaciones con un mismo espíritu

En la fabricación del Kia Sephia, que se extendió a lo largo de 11 años, se pueden diferenciar dos generaciones de vehículos que introdujeron cambios en todos los aspectos del diseño y de la mecánica de estos coches de segunda mano. Así, en primer lugar, los modelos de Kia Sephia fabricados entre 1992 y 1997 son los que responden a la llamada generación original, unos coches usados que presentan tres motores de gasolina y unas líneas de diseño donde la principal cualidad eran sus faros traseros, piezas que abarcaban todo el ancho posterior incluyendo la superficie de la puerta del maletero. Sus líneas rectas y su aspecto austero fueron revisados profundamente en los modelos fabricados entre 1997 y 2003, periodo en el que se desarrolló la segunda generación del Kia Sephia, que se define por unas líneas mucho más suaves y redondeadas, un tamaño ligeramente mayor que el de su predecesor y unos atractivos faros ovalados tanto en la parte trasera del coche como en la delantera. En lo que respecta al equipamiento, ambas versiones del Kia Sephia presentan diferentes modelos más o menos equipados, aunque todos responden a las características medias de un compacto de la época, por lo que sus niveles de confort y seguridad están garantizados en todos sus usos.

Desarrollo de los motores en cada generación

Los propulsores montados en las diferentes versiones de los Kia Sephia responden siempre a las exigencias que deben hacérseles a los motores de todo compacto, a saber, una mecánica robusta, una cilindrada ajustada para reducir el consumo y una potencia adecuada para hacer que el coche mantenga unas prestaciones excelentes. De este modo, la primera generación del Kia Sephia monta tres motores, todos ellos de gasolina, que cuentan con cilindradas 1,5, 1,6 y 1,8 litros, cubicajes que se unen a una transmisión manual de 5 velocidades y a otra automática de 4. En lo que respecta la segunda generación del Kia Sephia, el cubicaje de los motores se mantuvo inalterable y se siguió apostando solo por propulsores de gasolina, por lo que estos coches usados presentan unas excelentes prestaciones para aquellos que buscan vehículos compactos que sean muy polivalentes pero que mantengan unos niveles de potencia adecuados.