Honda S2000

Al mismo tiempo los japoneses querían llamar la atención sobre su larga tradición como fabricante de vehículos deportivos fundamentada sobre modelos biplaza como el Honda S 600 de los años 60. Por supuesto que el Honda S 2000 no era barato, pero como edición especial de aniversario rigurosamente limitada, éste debía quedar reservado a un exclusivo círculo de clientes durante un periodo de tiempo determinado.

El Honda S 2000 se convierte rápidamente en un clásico moderno

El hecho de que, posteriormente y contra todo pronóstico, surgiera una historia de éxito de diez años de duración es algo que el fabricante japonés debe agradecer a los norteamericanos. Ellos fueron los que descubrieron las extraordinarias cualidades de este deportivo y, gracias a la demanda allí generada, lograron que el Honda S 2000 se convirtiera en un vehículo de fabricación en serie. Más de la mitad de la producción fue a parar a los EE.UU., antes de que a mediados de 2009 Honda decidiera dar por concluida la producción con más de 100.000 unidades vendidas. A excepción del año 2000, por norma general a Alemania no llegaban anualmente más de unos pocos cientos de vehículos. Por este motivo, en Alemania el Honda S 2000 se consideró desde muy pronto un clásico moderno.

El Honda S 2000 aúna aptitudes para las carreras y una maniobrabilidad segura en carretera

En el Honda S 2000 los ingenieros de la marca nipona plasmaron muchos de los conocimientos que han permitido que germinara la semilla del éxito de Honda en el deporte del motor. El motor V4 de 177 kW (240 CV) fabricado en metal ligero se caracterizaba por sus altísimas revoluciones, que superaban la barrera de las 9.000 vueltas por minuto. Algo bastante inusual para un deportivo de calle. Al mismo tiempo, las suspensiones individuales para cada rueda, el diferencial de bloqueo y los estabilizadores transversales montados en ambos ejes, así como la distribución ideal 50:50 de la carga sobre los ejes de este roadster de tracción trasera lograban una buena maniobrabilidad y un comportamiento en carretera sumamente seguro. El Honda S 2000 alcanzaba los 100 km/h en tan sólo 6,2 segundos y su velocidad máxima era de 240 km/h.

El equipamiento interior del Honda S 2000 es deportivo y elegante

En el habitáculo del Honda S 2000, los pedales de aluminio perforados, los indicadores digitales de los instrumentos y los asientos deportivos ofrecían el marco adecuado para una puesta en escena dinámica. Las pretensiones de confort de los constructores quedaban de manifiesto en el equipamiento de cuero de serie y el techo de vinilo de plegado eléctrico. De forma opcional, el Honda S 2000 también se podía encargar con techo duro fabricado en aluminio y pintado en el mismo color que la carrocería. Según el fabricante, el consumo de este deportivo era de 10 litros de gasolina con unas emisiones de CO2 de 236 g/km.