Citroen Dyane

Uno de los vehículos más emblemáticos del fabricante francés

El Citroën Dyane nació en el año 1967 como una versión más atractiva y mejorada del 2 CV (otro de los míticos vehículos del fabricante francés, que ya había agotado su ciclo comercial), con el que pretendía plantarle cara al Renault 4. Aportaba frente a este un diseño renovado, con líneas más actuales, incluyendo una capota de lona y un portón trasero en condiciones. Lo que sí se mantenía era la misma mecánica, un bóxer bicilíndrico con una potencia de 21 CV.

El Citroën Dyane, más de 50 años de su nacimiento

Presentado con motivo del Salón del Automóvil de París del año 1967, el mítico Dyane se producía en diferentes plantas, incluida la factoría que el fabricante tenía ubicada en nuestro país, más concretamente en Vigo.

Popularmente, se trataba de la versión de reemplazo del 2 CV, aunque la verdadera intención de Citroën fue la de crear un vehículo nuevo para la gama de la Serie A con el que poder competir en el mercado.

El Dyane contaba, además de con su versión hatchback de 5 puertas, con una versión furgoneta, que recibió el nombre de Acadiane o 6/400 en nuestro país.

Tras 16 años en el mercado, en 1983 Citroën decidió finalizar la producción de su Dyane, con casi 1 millón y medio de unidades fabricadas, para dar paso al Visa.

Principales ventajas e inconvenientes

• El Citroën Dyane nunca destacó por contar con un atractivo diseño, y es que el fabricante francés prefería centrar sus esfuerzos en ofrecer otro tipo de ventajas en el mercado.

• Lo mismo ocurría en el interior del vehículo, ya que todos los elementos con los que contaba buscaban estrictamente la funcionalidad, sin ningún tipo de aderezo.

• Aunque se trata de un vehículo de cinco puertas para 4 ocupantes, su habitabilidad en las plazas traseras es muy poco confortable. Además, la visibilidad hacia atrás era prácticamente inexistente.

• Incluía, del mismo modo que ya venía haciendo su principal competidor, un portón trasero de acceso al maletero que mejoraba enormemente al de su predecesor.

• En marcha resultaba un vehículo con una estabilidad sobresaliente, así como con una suspensión capaz de absorber de manera perfecta los baches del camino.

• Sus motores carecían de potencia suficiente, sobre todo si se tenía que enfrentar a pendientes pronunciadas, donde le costaba enormemente avanzar.

• Por otro lado, homologaba unos consumos medios realmente comedidos, situándose en unas cifras de 6,7 l/100 km.

• Su precio de salida era bastante elevado, sobre todo en comparación con otras alternativas presentes en el mercado, aunque su coste de mantenimiento era bastante más ajustado.

El principal competidor del Citroën Dyane era, como ya se ha mencionado en líneas anteriores, el Renault 4, que dominaba el mercado gracias a una importante novedad, su quinta puerta.

Gama mecánica y equipamiento de serie disponible

Existieron distintas versiones del Citroën Dyane, aunque todas ellas montaban un propulsor bóxer de dos cilindros refrigerado por aire, así como una caja de cambios manual de 4 velocidades.

En el caso de la primera generación, del 67 al 69, el Dyane montaba un motor A79/0 de 425 centímetros cúbicos y tenía una potencia de 21 CV a 5500 rpm, alcanzando una velocidad punta de 105 km/h.

Posteriormente nacería el Dyane 4, que esta vez contaba con un motor M4 de 435 centímetros cúbicos y conseguía una potencia de 26 CV a 6750, con una velocidad máxima de 110 km/h.

Por ultimo aparecería el Dyane 6, con un motor M28 de 602 centímetros cúbicos, una potencia de 32 CV a 5750 rpm y una punta de velocidad de 120 km/h. Como curiosidad, destacar que este modelo fue de fabricación española, puesto que su producción corrió a cargo de la planta de Vigo.

Entre los principales elementos de su equipamiento de serie, destacan los faros delanteros encastrados en el guardabarros, el portón trasero de acceso al maletero, capota de lona enrollable en dos posiciones, embrague centrífugo y asientos traseros extraíbles.

¿Por qué comprar un Citroën Dyane?

Hablar del Citroën Dyane es hablar de uno de los clásicos más reconocidos del fabricante francés. Con la importante tarea de reemplazar al 2 CV, el Dyane nació con una importante novedad frente a este, su portón central, aunque mantuvo la misma línea de motorización. Se presentó como un vehículo sobre todo funcional y práctico, con una gran versatilidad gracias sobre todo a su carrocería, resistente y fiable. De este modo se convirtió en una opción muy recomendable tanto para su uso en la ciudad como en el campo, donde gozó de gran popularidad. Su escaso consumo y sus buenas sensaciones en conducción destacaban como sus principales virtudes, en contraposición a su diseño, poco atractivo, y su mala visibilidad trasera.