Citroen DS4

Para aunar mejor la individualidad con el gusto de las masas en un único producto al constructor finalmente se le ocurrió una idea arrolladora: la línea DS. Sobre la base de diferentes modelos de grandes series concibió utilitarios y modelos compactos de orientación deportiva y con un diseño individual y de gran calidad. En 2010 el Citroën DS3 marcó el inicio de esta nueva era y un año después ya tenía sucesor en la primera versión del Citroën DS4..

Líneas deportivas para el Citroën DS4

El Citroën DS4 dejaba clara su individualidad estética con sus marcadas líneas coupé y la dinámica zaga de un cross-over. El diseño bien podía resultar llamativo y extravagante, ya que al fin y al cabo estaba pensado para ese círculo de clientes al que la versión Citroën C4 orientada a las masas resultaba demasiado «normal». Tanto la tecnología como la plataforma procedían del modelo gemelo. Sin embargo, en comparación con el Citroën C4 la carrocería del Citroën DS4 era notablemente más ancha (1,81 metros), mientras que el recorte de los voladizos hacía que el DS4 de 4,27 metros ofreciera un aspecto más potente. Una de las particularidades del diseño del Citroën DS4 era que las manetas de ambas puertas traseras estaban integradas en la carrocería, de forma que el trazado de las líneas exteriores no se veía interrumpido estéticamente y el resultado era una apariencia similar a la de un coupé de dos puertas. Solo visto desde delante el Citroën DS4 dejaba claro que procedía del C4. En este caso, los constructores decidieron prescindir de un lenguaje creativo propio para el Citroën DS4, dejando que este modelo compacto de tintes más deportivos presentara la misma imagen de marca que el resto de los modelos de la época.

Las motorizaciones del Citroën DS4

A su llegada al mercado el Citroën DS4 contaba con cinco mecánicas diferentes y todas cumplían la normativa de emisiones Euro 5. En el apartado de los gasolina había disponible una motorización de acceso de 1,6 litros y 88 kW (120 CV), así como con una mecánica superior de 2,0 litros y 114 kW (155 CV). El propulsor más potente solo estaba disponible en combinación con un cambio de seis velocidades regulado electrónicamente. El modelo más alto de gama del Citroën DS4 desarrollaba hasta 147 kW (200 CV). En el caso de los diésel, el Citroën DS4 contaba en un principio con dos variantes de 80 kW (110 CV) y 121 (165 CV).