Vehículos seminuevos

Por vehículos seminuevos se entienden aquellos que tienen menos de 12 meses. A menudo, se cuenta a partir de la fecha de la primera matriculación. Desde el punto de vista jurídico, sin embargo, la fecha de fabricación real del vehículo resulta importante para denominar un vehículo como seminuevo. Dicha fecha, en el caso de un vehículo seminuevo, no debe remontarse a más de 12 meses.

Esta clase de vehículos resulta lucrativa tanto para el vendedor como para el comprador. El vendedor puede reducir la pérdida de valor del automóvil si lo vende como vehículo seminuevo. Los compradores de vehículos seminuevos adquieren así un vehículo casi nuevo sin pagar por ello el precio que supondría comprar uno completamente nuevo.

Es posible adquirir vehículos seminuevos de todas las marcas. A menudo son los empleados de las empresas de automóviles como Opel, BMW, Audi o Mercedes los que compran esta clase de vehículos. Ello se debe a que los empleados pueden a menudo adquirir vehículos nuevos por un precio ventajoso y evitar así pérdidas si los vuelven a vender como vehículos seminuevos. Estas condiciones especiales también se ofrecen con frecuencia a empleados de la empresa que ya se han jubilado. Dichos empleados también venden su antiguo automóvil como vehículo seminuevo antes de adquirir en su empresa uno nuevo.

No todos los denominados seminuevos se asemejan. Como sucede en todos los vehículos de segunda mano, el estado de un seminuevo depende de su anterior propietario. El kilometraje y el estado técnico de estos vehículos puede variar considerablemente en función de los hábitos de conducción del anterior propietario. El desgaste del habitáculo también depende en gran medida de las costumbres del anterior propietario, por ejemplo de si fumaba o no.