BMW Z1

Entre las novedades tecnológicas del BMW Z1 destacaban sus puertas que se retraían verticalmente hacia abajo con ayuda de unas correas dentadas para desaparecer dentro de la carrocería. De esta forma, el conductor del BMW Z1 podía conducir sin puertas. Además, gracias a su motor central delantero en el BMW Z1 se logró alcanzar un equilibrio óptimo entre el eje delantero y el trasero. Otra novedad fueron las piezas de la carrocería fabricadas en aluminio y plástico reforzado con fibra de vidrio. Su instalación mediante tornillos hacía que las reparaciones del BMW Z1 se pudieran realizar de forma mucho más rápida. La insonorización acústica situada en la parte inferior del coche lograba que el ruido de fondo resultara casi imperceptible. La novedosa construcción del eje trasero, empleada por primera vez en el BMW Z1, fue incorporada más adelante por BMW a la producción en serie de los modelos Serie 3.

Este elegante deportivo está equipado con el motor de seis cilindros y 12 válvulas y una cilindrada de 2.494 ccm procedente del BMW 325i. Gracias a él, este vehículo de 125 kW/170 CV logra una velocidad máxima de 225 km/h. El tiempo de aceleración de 0 a 100 km/h se cifra en 7,9 segundos. El consumo del BMW Z1 también resulta razonable. De media, este modelo consume 9,2 litros de gasolina normal a los 100 km. No obstante, el BMW Z1 no contaba con una oferta de equipamiento extra demasiado amplia. El BMW Roadster sólo se fabricó en una variante. Por este motivo, los compradores sólo tenían la posibilidad de elegir el color de la carrocería y el equipamiento interior.