Interesado en el BMW M1
Nuestro conocimiento sobre su búsqueda
Prueba: BMW X1 Xdrive – Mi primer BMW
VÍDEO| Prueba del BMW iX1: un heredero de altura
VÍDEO| Prueba BMW M440i xDrive Gran Coupé: a las puertas de la excelencia
Prueba: BMW R 1200 GS Triple Black – Oscura seducción
VÍDEO| Prueba BMW X4 2.0d: renovación interesante con etiqueta ECO
VÍDEO| BMW X2 M35i 2024: más grande y rápido
En realidad, y a excepción de una pequeña edición especial, el BMW M1 no fue diseñado para su venta al público, sino únicamente como deportivo para su exhibición en circuito. Sin embargo, el sueño de BMW se fue al traste al producirse ciertas modificaciones en el reglamento de las carreras internacionales que lo dejaron fuera de los circuitos. El modesto palmarés deportivo del BMW M1 se reduce únicamente a las series Procar. Por lo demás, este deportivo se vendió casi exclusivamente a clientes privados.
En el apartado estético, el BMW M1 llamaba la atención por sus faros traseros tomados de la primera generación del Serie 6, así como por el hecho de que sus diseñadores se decantaron por los faros retráctiles para garantizar una mejor aerodinámica. El motor del prototipo tenía cuatro cilindros y tan sólo 200 CV. Por el contrario, el BMW M1 que se comercializó se equipó con un motor de seis cilindros en línea de 277 CV que desplazaba 3,5 litros. Así, el BMW M1 se convirtió en el vehículo de producción en serie más veloz de su época. Finalmente, el BMW M1 también se equipó con otros con motores de carreras que desarrollaban entre 470 y 850 CV (con turbocompresor). Algunos de estos bólidos se pueden ver hoy en día en el Museo de BMW en Múnich.