BMW 840

Una característica que los diferencia del resto de sus hermanos son sus faros automáticos ocultos, una cualidad bastante poco común en la historia de la marca germana. Los interiores y acabados del BMW 840 eran impecables. Cuero de alta calidad, electrónica de última generación y diseño sin parangón eran sus mejores propuestas para los amantes de la velocidad. Lo cierto es que el BMW 840 es hoy un verdadero clásico de los deportivos. BMW incluso llegó a realizar un prototipo de M8 con el que pensaban romper todos los moldes. Pero el proyecto no llegó a cuajar vistos los resultados de la Serie 8 por aquellos años. Solo se llegaron a fabricar un total de 30.621 unidades de toda la serie al completo, lo que le convierte hoy en día en uno de los deportivos más buscados entre los coches de segunda mano, tanto por sus características como por su exclusividad.

Modificaciones del BMW 840 durante sus once años de fabricación

Salieron varios modelos del BMW 840, entre ellos los Ci de 8 válvulas y 4 litros, que daban un excelente rendimiento con sus 286 CV. El siguiente modelo, a partir de 1996, presentaba un V8 de 286 CV, igual que su antecesor, pero con un motor de 4,4 litros. Otro modelo digno de mención fue el BMW 840 Alpina, todo un ganador con sus 450 CV de potencia. Es interesante saber que el MBW 840 solo se fabricó en motor de gasolina con carrocería cupé. En cuanto a caja de cambios, existían las variantes manual y automático, aunque la manual era lo más usual por aquellos años. También merece la pena comentar que no se pudo sacar la versión descapotable debido a su estructura, ya que carecía de columna B.

Motores de la Serie 8 en el mercado de coches de segunda mano

Los Serie 8 son los deportivos de lujo que se adelantaron a su época sin ningún género de dudas. Los 840 de 4 litros, y sus sucesores Alpina y el 4,4 litros a partir de 1996, no fueron los únicos en sobrevivir al paso de los años y despuntar dentro de la historia del motor. El 850i V12 de 300 CV le seguía la pista y, en enero de 1993 salió el 850Ci, también con 12 V y 5 litros, que sacaban un rendimiento de 300CV. A partir de 1994, y hasta su retirada de la cadena de producción, el 850Ci llegó a los 5,4 litros y a unos increíbles 326 CV. Pero esto acaba aquí. El modelo 850 CSi llegó a sacar 380CV con sus 5,6 litros y fue diseñado por la división M de BMW. De hecho, su velocidad máxima es de 250 km/h, aunque sin la limitación electrónica es capaz de llegar hasta los 299 km/h. No hay muchos coches de segunda mano en la historia de la automoción que puedan alardear de tener estas cualidades tan notorias sin tener unos precios astronómicamente elevados. Posiblemente, BMW no sacó todo el rédito económico que esperaba de su Serie 8 pero, desde luego, los fanáticos de los deportivos han sabido recompensar su esfuerzo y su trabajo admirando una obra de la mecánica como esta y buscando sus huellas por todos los concesionarios de coches usados del país.