BMW 550

La Serie 5 de BMW sigue evolucionando

El Serie 5 de BMW nació en el año 1972 y su séptima generación se presentó en 2017. Más de 45 años de historia que convierten a esta gran berlina en una de las más longevas del mercado.

El renovado BMW 550 sustituye a la versión de 2010, que ya se había sometido a un restyling en 2013, e incluye los últimos avances en materia de tecnología y asistencia a la conducción, contando incluso con algunos elementos de conducción autónoma, que permiten al conductor soltar el volante en atascos, cambiar de carril automáticamente o incluso aparcar en plazas con buenas dimensiones.

Principales ventajas e inconvenientes

• Por fuera, este imponente vehículo representa exactamente lo que es, una gran berlina de lujo, que en esta última renovación se presenta aún más rotunda, aerodinámica y deportiva.

• El interior del BMW 550 destila auténtico lujo, con una calidad de materiales y acabados que justifican claramente su estatus de vehículo premium y un toque futurista muy atractivo.

• Gana en tamaño en todas sus cotas, consiguiendo una mayor habitabilidad en sus plazas traseras.

• Lo mismo ocurre con su maletero, que alcanza los 530 litros en la versión Berlina y llega hasta los 570 en el Touring.

• Tanto la versión diésel como la gasolina montan potentes motores TwinPower Turbo que consiguen buenos datos de consumo, incluso para los segundos.

• Con un precio de salida de más de 100.000 euros, se trata de un vehículo no apto para cualquier bolsillo, existiendo berlinas menos premium más asequibles.

En este segmento de las grandes berlinas, el BMW 550 compite directamente con el resto de propuestas de los fabricantes alemanes, como son el Audi A6 y el Mercedes-Benz Clase E (también en sus versiones familiares Avant y Estate), así como con el Jaguar XF o los Volvo V90 y S90.

Características de los motores y precios

El BMW M550d xDrive monta un propulsor diésel TwinPower Turbo de seis cilindros y 400 CV, con un par máximo de 760 Nm, mientras que su alternativa en gasolina, el M550i, equipa un mismo bloque, esta vez entregando una potencia de 462 CV.

El propulsor diésel cuenta con una velocidad punta de 250 km/h, limitada electrónicamente, y consigue alcanzar los 100 km/h en apenas 4,4 segundos. Sus cifras de consumo, teniendo en cuenta la potencia de su motor, son bastante ajustadas, homologando un promedio de entre 6,5 – 6,6 l/100 km. Por su parte, el promedio de emisiones se sitúa entre los 171 y los 173 g/km.

Por su parte, su alternativa gasolina, gracias a su motor de 462 CV, es capaz de alcanzar los 100 km/h en tan solo 4 segundos, homologando unos consumos algo más elevados, aunque eficientes, con una media de entre 8,9 y 9,1 l/100 km y unas emisiones entre los 204 y los 209 g/km.

Ambas opciones traen de serie el sistema de tracción total xDrive, así como una caja de cambios automática Steptronic de ocho relaciones y convertidor par.

A continuación se muestra el precio de salida para sus versiones diésel y gasolina, en carrocería Berlina o Touring:

• M550d xDrive Touring 400 CV por 102.200 euros
• M550d xDrive Berlina 400 CV por 103.250 euros
• M550i xDrive Berlina 462 CV por 103.100 euros

Equipamiento de serie disponible

El BMW 550 está disponible en hasta cuatro acabados distintos, correspondientes al nivel de acceso, el acabado Luxury, el Sport y el M Sport.

De serie, tanto la berlina como la versión familiar montan llantas de 17 pulgadas, faros antiniebla en LED, pantalla independiente de 8,8 pulgadas, control de distancia de estacionamiento (tanto delantero como trasero), sistema de navegación Business y servicios ConnectedDrive.

¿Por qué comprar un BMW 550?

Hablar de la Serie 5 de BMW es hablar de uno de los vehículos premium más longevos en su segmento, y es que esta última renovación pertenece ya a su séptima generación. Este BMW 550 se presenta en dos versiones de carrocería, Berlina o Touring (de corte familiar), así como con opciones de motorización tanto diésel como gasolina. Cuenta con un diseño exterior elegante y dinámico y un interior moderno y lujoso, que gana en habitabilidad y mejora la capacidad de su maletero. En lo que respecta a sus mecánicas, si lo que se busca es la máxima eficiencia del motor, la opción diésel es la más recomendable, pero si lo que se prefiere es una conducción ágil y mayor potencia, el bloque gasolina es la mejor opción.