Audi RS3

Aunque en un principio solo estaba disponible en versión dos puertas, a partir del año 2008 la filial responsable de la imagen deportiva del Grupo VW lanzó la segunda generación del Audi S3 también en versión Sportback de cinco puertas. En ese momento para muchos clientes surgió también la duda de por qué el fabricante solo incluía sus compactos clásicos en la gama de modelos de la línea S.

Alto rendimiento para el Audi RS3, el máximo estandarte de la categoría de los compactos

Como es lógico, en el caso de los modelos A4 y A6 el listón estaba situado a un nivel más alto. En lo que respecta a la clase media, desde la presentación del Audi RS2 en 1994 la gama de modelos Audi RS se había convertido en sinónimo de máximo rendimiento de familiares, berlinas y cabrios. Doce años después de la introducción de la clase compacta, en el año 2010, por fin estaba disponible la versión más potente de esta gama de modelos. En la primavera de 2011 llegaron a las carreteras los primeros Audi RS3 Sportback.

Diseño deportivo para el Audi RS3

Ya a primera vista su presencia era indicativo de la posición de liderazgo que el Audi RS3 iba a asumir dentro de la clase compacta de los de Ingolstadt. Con un diseño deportivo dinámico, la vista frontal de este cinco puertas estaba dominada por una parrilla singleframe en forma de rombo y los perfiles cromados de sus imponentes entradas de aire. La trasera se caracterizaba en gran medida por un difusor de color plateado en el que se encontraba integrado un doble tubo de escape cromado. De forma opcional, los perfiles de color cromo también se podían encargar en negro brillante. Otro rasgo característico de la versión deportiva Audi RS3 era el alerón de techo recortado que, teniendo en cuenta la potencia del motor, servía para la optimización de la propulsión trasera. De serie, el Audi RS3 contaba con llantas de 19 pulgadas de aluminio fundido combinadas con un sistema de frenos de 18 pulgadas.

El Audi RS3 muestra el salpicadero de un deportivo

Incluso en su interior el Audi RS3 se diferenciaba en gran medida de los modelos de serie de la clase compacta. Para lograr la misma sensación que tendría cualquier conductor dentro de un deportivo se incluyeron asientos concebidos especialmente para una mejor sujeción lateral que, de forma opcional, podían sustituirse por asientos envolventes en rojo y negro. Por lo demás, en el salpicadero dominaba un estilo puro en color negro con algunos elementos en aluminio. A esto había que añadir un volante deportivo en piel equipado con levas, tal y como los que podemos ver en los coches de carreras. En consonancia con el conjunto, el fabricante equipó el Audi RS3 con pedalería de aluminio.

Las motorizaciones deportivas del Audi RS3

En el apartado de las motorizaciones del Audi RS3 los de Ingolstadt apostaron por un gasolina turbo de cinco cilindros. Este propulsor de 2,5 litros generaba en el Audi RS3 una potencia de hasta 250 kW (340 CV), lo que combinado con un par motor de 450 Nm proporcionaba un sonido potente y una gran progresión. La aceleración de 0 a 100 km/h del Audi RS3 concluía a los 4,6 segundos, mientras que su velocidad máxima se reguló electrónicamente en 250 km/h. Con esta mecánica de alto rendimiento y un sistema orientado a la recuperación de energía durante la frenada el Audi RS3 registraba un consumo medio de gasolina de 9,1 litros a los 100 kilómetros, lo que correspondía a unas emisiones de CO2 de 212 g/km. El motor estaba combinado con un cambio de doble embrague de siete velocidades con optimización temporal de los procesos de cambio.