Alfa Romeo Alfetta

En 1976 la empresa creó la versión deportiva del Alfetta, el coupé Alfetta GTV, que gozó también de mucha popularidad, destacando por su elevada velocidad punta. Con la fabricación del Alfetta, la firma italiana introdujo un nuevo diseño en la transmisión: por primera vez el embrague y la transmisión fueron ubicados en la parte trasera. Asimismo, el sistema de suspensión contaba con brazos transversales dobles y barras de torsión, en la parte delantera, y un tubo de Dion en la parte trasera. Su mayor renovación se produjo en 1979, con un cambio sustancial en los faros, pilotos y llantas, fecha en la que también apareció la primera versión diésel del modelo.

Características generales del modelo Alfetta de Alfa Romeo

En aquella época, el Alfetta despertó una gran expectación ante su inminente salida al mercado, puesto que se trataba de un proyecto revolucionario de la popular marca italiana. Un modelo que combinaba perfectamente elegancia, comodidad y amplitud con una gran velocidad y estabilidad como si de un deportivo se tratase. Entre los competidores de la época, se encontraban el BMW 518 y el Peugeot 505, que también gozaron de elevadas cotas de popularidad. No obstante, el Alfetta, pese a unas dimensiones algo más reducidas que las de los vehículos señalados, resistía con solvencia las comparativas con estos automóviles de alta gama de la época. Otro aspecto innovador de este modelo de Alfa Romeo fue su línea aerodinámica, con una resistencia aerodinámica de 0,42, lo que lo situó en la vanguardia en cuanto a su línea y diseño.

Los coches usados del modelo Alfetta aún siguen siendo cotizados en el mercado de ocasión

Convertido ya en un clásico, el Alfetta de Alfa Romeo sigue siendo una berlina deseada por muchos amantes del motor, que buscan la robustez y las características propias de los coches de esa época, en la cual destacaba considerablemente. En el mercado de ocasión se pueden encontrar, sin problemas, coches usados de este modelo muy bien conservados, puesto que los propietarios suelen ser grandes aficionados que realizan restauraciones excelentes a estos vehículos, los cuales cuentan con varias décadas de antigüedad. Vehículos usados en muy buen estado, que se pueden adquirir a precios bastante asequibles económicamente, y que aún pueden brindar un gran rendimiento en carretera. No cabe duda de que es un deleite poder disfrutar, a día de hoy, de la excelente conducción de estos auténticos clásicos italianos de las cuatro ruedas.